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domingo, 27 de agosto de 2017

El catéter para Hemodiálisis: 12 cuidados habituales que debes saber.

Para realizar la hemodiálisis necesitamos un acceso vascular, es decir, un punto donde la sangre pueda salir para pasar a la máquina de diálisis, proceder a su limpieza y devolverla al organismo.

En el capítulo anterior hablábamos de la fístula para Hemodiálisis. Hoy repasaremos los tipos, las ventajas y desventajas y los 12 principales cuidados para el otro tipo de acceso vascular para hemodiálisis: El catéter central.






¿Qué es un catéter para hemodiálisis?


Es un dispositivo que se introduce en una gran vena del cuerpo, siendo las más frecuentes yugular (cuello), femoral (ingle) o subclavia (debajo de la clavícula) por donde se extrae sangre que pasa por el dializador de la máquina de diálisis y es devuelta limpia al organismo por el mismo catéter, es decir tiene 2 ramas, una por donde sale y otra por la que entra la sangre limpia.




¿Por qué es necesario colocar el catéter en una vena de gran calibre como femoral, yugular o subclavia y no se pueden utilizar venas más pequeñas ( periféricas) como la de los brazos donde se realizan los análisis de sangre?


Esto es debido a la poca "fuerza" o flujo de sangre que obtendríamos si empleásemos esas venas periféricas (aunque su punción sea mucho más fácil). Esto nos produciría una diálisis de poca calidad,el sistema tendería a coagularse dado que la sangre circula a poca velocidad.


Tipos de Catéteres

En cuanto a su localización, en función de la vena en la que se introduzcan, distinguiremos entre:

- Yugulares: Se coloca en el cuello. Más limpio, accesible y seguro. El más utilizado en las unidades.
- Subclavios : Debajo de la clavícula, más utilizado en unidades de cuidados intensivos.
- Femorales :  En la ingle. Menor riesgo en la colocación, los más utilizados en momentos de urgencia.





En función del modo de colocación:


El catéter transitorio:  se coloca fundamentalmente en situaciones urgentes en las que un paciente necesite diálisis. En caso de pacientes con enfermedad renal crónica, se coloca sobre todo en tres situaciones: Mal funcionamiento o"parada" (trombosis) de la fístula, paciente que no se haya realizado fístula previamente y necesite diálisis, y cuando se prevea que el catéter se va a utilizar durante poco tiempo.
Estos catéteres tienen un riesgo en la implantación y problemas asociados a infecciones, sangrados y malfuncionamiento
No se deberían mantenerse durante más de un mes.

- El catéter permanente:  es más seguro, más comodo y su funcionamiento es mejor. Va introducido por debajo de la piel hasta acceder a la vena. Además al ir más sujeto, no se mueve tanto y su funcionamiento es mucho mejor.
- No suele colocarse de urgencias ya que requiere un pequeño quirófano y una sala de rayos para ello.
Pueden durar años y su empleo se suele reservar para aquellos casos en que no pueda realizarse fístula o ésta haya dejado de funcionar y no pueda realizarse otra nueva.







Ventajas y desventajas del catéter sobre la fístula



Ventajas de la fístula sobre el catéter


– La fistula proporciona que la sangre salga con más fuerza (flujos de sangre más elevados), con lo que dializa más y por ello la sangre se limpia mejor.
– La tasa de infecciones suele ser menor.
– La duración de la fistula suele ser mayor.
- Menos problemas de funcionamiento que los catéteres.


Las ventajas del catéter sobre la fístula

– Una utilización mucho más rápida, ya que se puede hacer en el momento, la fistula debe madurar como mínimo uno o dos meses antes de poder ser utilizada.

– No hay punción (se conectan las lineas del catéter) por lo que no duele. La punción de la fistula puede doler (aunque suele ser al inicio de la diálisis y puede paliarse con cremas).



- 12 cuidados habituales del catéter central



Como reglas generales tanto para catéteres temporales como para permanentes se pueden citar las siguientes:

1.  Utilice solo su catéter para Hemodialisis.

2. Mantener el catéter cubierto y seco. No manipular NUNCA el catéter, es decir, evitar tirones, roces… Deberá ir siempre bien protegido. 

3. No deberá utilizarse el catéter para procedimientos hospitalarios, no podrá usarse para sacar analíticas, infundir sueros… su uso es exclusivamente para diálisis.

4.  Asegurarse de que el área del acceso se limpie en la sesión de hemodialisis y se cubra con gasas o parche nuevo . Sin embargo, en la ducha, intentar no mojar directamente el catéter ni la zona de inserción en la piel (Tenga en su casa el material necesario para cubrir su cateter de ser necesario ).

5. Nunca permita que entre aire en su catéter, no quite los tapones.
6. Tenga cuidado de no golpear ni cortar su catéter.

7. No se sumerja o nade, puede ducharse sin mojar el catéter (ya que la humedad puede causar infección).

8. En caso de catéteres femorales intentar no permanecer mucho tiempo con la pierna flexionada (sentados) por riesgo de trombosis.

9. En caso de sangrado del catéter, comprimir con una gasa y si no cede la hemorragia acudir al hospital

10. Si se observa enrojecimiento, dolor, salida de líquido amarillo-verdoso por el catéter, fiebre… es probable que se encuentre infectado, por lo que habrá que comunicarlo de inmediato al personal sanitario que le atiende.

11. Solamente el personal de la unidad de Hemodialisis puede utilizar el catéter para tomar muestras o administrar medicamentos.

12. El personal que realiza la conexión de la Hemodialisis y usted mismo deben utilizar mascarilla y guantes para manipular el catéter.





CONCLUSIÓN

- El catéter es un instrumento imprescindible para el Nefrólogo y se utiliza normalmente en situaciones de urgencia y en aquellos paciente en los que no se puede realizar fístula.
- Hoy en dia su colocación en más segura gracias a la Ecografía.
- Siempre se preferirá una fístula arteriovenosa a un catéter permanente por sus mayores riesgos, pero si no puede realizarse por las características de las venas de la persona, se podrá dializar a través de un catéter.


 










Bibliografía complementaria:

http://www.revistanefrologia.com/es-libros-monografias-actualizables-nefrologia-dia

https://nefrocruces.com/2015/03/22/cateter-para-hemodialisis/

wwwrevistaseden.org

miércoles, 24 de mayo de 2017

Qué debo saber sobre el cuidado de la Fistula para hemodiálisis

¿Qué es?

La Fístula arterio venosa (FAV) es una unión de una arteria y una vena que se realiza por medio de un cirujano vascular para crear el medio ideal para realizar una hemodiálisis: Un vaso sanguineo, la vena, con una pared más fina, menos dolorosa, a la que hemos unido y dado la fuerza del flujo de una arteria, para poder sacar la sangre, limpiarla y devolverla. Esta vena se hará más gruesa y grande y creará una trayecto idoneo para puncionar con las agujas.




¿Qué tipos hay?


Hablamos de FAV autóloga cuando se realiza sobre la arteria y la vena nativa del brazo de el paciente.
Las FAV protésicas, son aquellas en las que se une una prótesis vascular a los vasos del paciente y se punciona sobre él.


¿Cuándo tengo que tener una fístula AV?


La FAV se planteará realizar cuando los riñones ya se encuentran con una función muy deprimida y sea necesario preparar al paciente para el comienzo, siempre una vez informado de las diferentes ténicas de diálisis y elegida la opción de Hemodiálisis. Esto es muy importante, ya que tener la fistula preparada hará que el inicio sea programado o menos taumático para el paciente renal.



¿Qué cuidados tengo que tener en cuenta cuando tenga la fístula hecha?


Lo dividiremos en 3 fases:


1. Período después de la intervención

Aquí entra el juego el papel de los sanitarios de la unidad de diálisis. Los cuidados de enfermería van encaminados a observar y detectar complicaciones que conduzcan al fracaso temprano de la FAVI. Se valorará el soplo del acceso vascular, el thrill (vibración de piel en zona de la fístula), el apósito, el pulso periférico del miembro donde se ha implantado la FAVI y su temperatura y color.

El miembro superior implicado en el proceso debe mantenerse elevado favoreciendo la circulación de retorno y así evitar edemas.


¿Qué debe hacer el paciente en casa?


- Autocuidados higiénicos

No levantar el apósito en las primeras 48 h, 
No mojar el apósito y cambiarlo si estuviera sucio o humedecido
Cubrir la zona si existe riesgo de traumatismo o contaminación.


- Autocuidados preventivos

Movilizar el brazo con suavidad evitando ejercicios bruscos
No permitir la toma de tensión arterial, cateterismos, administración fármacos y punciones venosas o arteriales en el miembro que porta la fístula y llevar un distintivo o pulsera que alerte sobre ello. Evitar vendajes salvo hemorragia. 
No dormir sobre el brazo, ni portar ropa o joyas que lo compriman.

- Vigilancia

Observación y exploración de la FAVI, reconociendo el thrill desde los primeros momentos posteriores a la cirugía detectando si hay variaciones, observando si hay cambios en la zona de la cirugía, color, dolor, inflamación, temperatura. 




- Signos y síntomas de alerta: 

Inflamación 
Dolor 
Hemorragia 
Supuración 
Disminución del trhill o ausencia.




2. Período de maduración

Desde la realización de la fístula hasta su utilización se producen cambios de dilatación y engrosamiento de las paredes del vaso de la FAV.

Importante:  El paciente debe favorecer el desarrollo de su FAV (a partir del tercer día): realizando  ejercicios isométricos (abrir y cerrar el puño), apretando una pelota del tamaño de la mano.

En los accesos autólogos el período de maduración mínimo es de 4 semanas y en los protésicos el tiempo mínimo es de 2 semanas. Estos períodos dependerán de las características del paciente y su comorbilidad.

El cuidado adecuado del AV favorece su maduración, previene la aparición de complicaciones y prolonga la supervivencia del mismo.




3. Período de utilización en hemodiálisis. 


Del buen estado del AV dependerá la eficacia de la diálisis y, en consecuencia, la salud y bienestar de la persona que se dializa. Los conocimientos y la aptitud de la/el enfermera/o y del paciente son factores determinantes para la evolución del acceso.

La decisión del momento de canalizar el AV por primera vez ha de hacerlo personal debidamente entrenado para evitar complicaciones.

Antes de la punción el enfermero/a valora aspecto, trayecto y alteraciones en la fistula respecto a punciones anteriores, valora el thrill o soplo en todo el trayecto venoso y se decide cual es la mejor zona la puncionar.

La retirada de las agujas ha de realizarse cuidadosamente a fin de evitar desgarros. En muchas ocasiones el propio paciente colaborará comprimiendo sobre los orificos, aunque en las primeras punciones ha de realizarse siempre por personal de enfermería experto.

Se recomienda un tiempo de hemostasia mínimo de 10-15 min o bien hasta que se haya formado un coágulo estable en el sitio de punción. 








Autocuidados del paciente en el período interdiálisis


-  Añadidos a los autocuidados referidos en el período de maduración, instruiremos al paciente para que la retirada del apósito la haga al día siguiente de la sesión de diálisis, de manera cuidadosa.

- En caso de que el apósito se pegue a la piel, este se humedecerá para evitar tirones y sangrado.

- Nunca ha de levantarse la costra de la herida.

- En caso de sangrado, comprimir los puntos de punción y hacer la hemostasia de igual forma que cuando lo realiza al final de la sesión de hemodiálisis.

- Mantendrá una adecuada higiene del brazo del AV con lavado diario con agua y jabón, o con mayor frecuencia si las circunstancias lo aconsejan.




Conclusiones

- La FAV es el mejor acceso y clave para tener un inicio de Hemodiálisis programado y seguro. Debe de realizarse en las consultas prediálisis.

- El tiempo de maduración dura unas semanas, en las cuales realizaremos observación, cuidado y ejercicios para tenerla desarrollada para su utilización.

- El protagonista principal del proceso de cuidados de la FAV es el paciente. Su bienestar integral y su seguridad son objetivos principales.

- Optimizando las actuaciones de cuidado del paciente como del cuidado por el enfermero o médico de hemodiálisis, se puede lograr una reducción de complicaciones, mayor longevidad del AV, incremento en la calidad de vida de los pacientes.








Bibliografía:

Care of arteriovenous fistulas. Nursing interventions and activities. Dial Traspl 2010;31:12-6 - DOI: 10.1016/S1886-2845(10)70005-9

martes, 2 de mayo de 2017

Nutrición en diálisis: ¿Cuánto tomar y cuáles son las mejores verduras para el enfermo renal?

Las verduras son alimentos con bajo nivel calórico y con propiedades asociadas a la buena salud. En paciente renales la verdura se convierte en un grupo alimenticio muy bueno para la prevención del riesgo cardiovascular, pero hay que tener en cuenta que como producto vegetal, algunas pueden tener alto contenido en potasio y fósforo por lo que no hay que abusar.

En todas las consultas de Nefrología incidimos en la correcta cocción y remojo de las verduras para eliminar parte del potasio asociada. Al igual que es preferible congelar y después consumir.

Algunas verduras tan frecuentemente consumidas como las acelgas o las espinacas son desaconsejadas por ser las que más contenido en potasio tiene.

Os dejo una lista con las verduras de mejor perfil para el enfermo renal y las cantidades diarias aconsejadas.











domingo, 30 de abril de 2017

Nutrición en diálisis: Patatas, Cereales y Legumbres.

Siguiendo con la entrada anterior del Blog, hoy traigo otro grupo alimenticio, el de las patatas, las legumbres y los cereales, incidiendo la precaución en tomar cereales dos veces al día y revisando cuanto consideraríamos una ración.

Las legumbres tiene alto contenido en potasio. La soja y las alubias son las de mayor, mientras que las judías verdes o los guisantes, son los que menor tienen, estando los garbanzos en punto intermedio. En tal caso se recomienda una vez por semana, incidiendo en la correcta cocción.

Hay que evitar alimentos integrales, bollería industrial por su alto contenido en aceite de palma y grasas saturadas, y los snack o bolsas de patatas por su alto contenido en sal, que harán tener más sed y acudir con más peso a diálisis.






jueves, 20 de abril de 2017

Nutrición en diálisis: ¿Cuánta fruta puedo comer? ¿Cuáles son la más adecuadas? ¿Cuáles No debo tomar?

La fruta es una comida fundamental y saludable en una dieta normal, pero en enfermos renal está restringida por su gran contenido en potasio.

Hoy traigo dos recuadros de las guías de nutrición de enfermos renales promovido por Asociación de apoyo al enfermo renal, en el que repasa cuanta fruta se puede comer, cuáles son las más adecuadas, en qué cantidad y cuáles están prohibidas.

Se puede comer entre 1 y 2 piezas de fruta al día, en función de los niveles de potasio que tenga normalmente y que debe de consultar con su Nefrólogo.












sábado, 25 de marzo de 2017

Vitamina D: Cuál es la población de riesgo y qué beneficios se han asociado.

El estudio de la vitamina D ha tenido un gran impacto en los ultimos años. La vitamina D es liposoluble, además de ser un micronutriente esencial, aunque también debe considerarse como una hormona por su actuación y secreción interna, con un papel fundamental en la homeostasis mineral. Su función principal es proteger la integridad del esqueleto y modular el crecimiento y la diferenciación celular en una amplia variedad de tejidos.

El déficit de vitamina D puede llegar hasta el 61% ,como se vió en un estudio en jóvenes universitarios sanos de Canarias (niveles de 25(OH)D <30 ng/ml) y el 32% niveles inferiores a 20 ng/ml.



¿Qué hace la vitamina D?

La vitamina D se encarga de reclutar el calcio del organismo para aumentar su concentración en sangre cuando desciende. Y eso lo hace aumentando sus receptores en el intestino para absorber de la dieta, liberando calcio del hueso y aumentando la reabsorción de Calcio o Fósforo en el riñón.

Últimamente se ha asociado a beneficios de salud relacionados con el riesgo cardiovascular y el cáncer.


¿Cómo logro buenos niveles de Vitamina D?

La principal fuente de vitamina D proviene de la exposición de la piel a la luz solar. Otra parte, en menor cuantía, proviene de la ingesta. Está presente en huevos, carne y pescados grasos (salmón, caballa), y en algunos alimentos enriquecidos (en leche, cereales...).
Al déficit se llega por una pobre exposición al sol junto a déficit de consumo adecuado.





Factores que influyen en un déficit de vitamina D y Población de riesgo

La exposición solar: 

- El exceso de horas de trabajo en interior de edificios, la contaminancion, la nubosidad.
- Los meses de invierno, finales de otoño e inicio de primavera son meses con baja síntesis de vitamina que hay que contrarrestar en verano.
- La superficie corporal expuesta y la protección solar, por lo que hay que tener en cuenta tanto el uso de cremas solares protectoras como la ropa.
- La pigmentación de la piel es uno de los factores más importantes, ya que afecta al tiempo necesario para producir vitamina D; así, los individuos de piel oscura necesitan entre 3-4 veces más de exposición solar para alcanzar los mismos niveles de vitamina D que los de piel clara.

Las enfermedades asociadas con malabsorción de las grasas:

La enfermedad inflamatoria intestinal, celiaquía, la insuficiencia pancreática, la fibrosis quística o la colestasis hepática se asocian con concentraciones séricas bajas de vitamina D.

Las enfermedades hepática y renal:  pueden impedir la adecuada hidroxilación de la vitamina D a sus formas activas y causar déficit de vitamina D.

Obesidad.

Fármacos: antiepilépticos (ej. fenobarbital, fenitoína), rifampicina, antirretrovirales o corticoides a largo plazo, se ha asociado también a niveles bajos de 25(OH)D. Debido a que la vitamina D es liposoluble, el orlistat y la colestiramina pueden reducir su absorción, por lo que se recomienda no administrarlos juntos.

Por lo tanto la población de riesgo sería: Ancianos institucionalizados, obesos, niños con déficit nutricionales, enfermos renales y hepáticos, y paciente con enfermedades crónicas con tratamientos antes comentados




Niveles Recomendados y cantidad diaria

El Institute Of Medicine (IOM) concluye que niveles de 25(OH)D de 20 ng/ml cubrirían los requerimientos del 97,5% de la población y este nivel de corte de 20 ng/ml sería el valor útil para los profesionales sanitarios en el manejo de los pacientes en la práctica clínica.


  •  400 UI/día para menores de 1 año 
  •  600 UI/día para edades comprendidas entre 1 y 70 años, incluidos embarazo y lactancia 
  •  800 UI/día para adultos mayores de 70 años 
  •  El límite tolerable de vitamina D establecido por el IOM es de 4.000 


Beneficios de la vitamina D

- Beneficios Óseos: Numerosos estudios ha demostrado una relación favorable asociada a buenos niveles de vitamina D y toma de suplementos en la prevención de Fracturas óseas. Además, también se ha visto mejorías en la biopsias oseas de pacientes con osteomalacia y en densitometrías en osteoporosis. De tal forma que a mayores niveles de vitamina D, se asocian a menos fracturas y mejor mineralización de hueso.

.- Mejor respuesta a tratamiento para osteoporosis: La vitamina D mejora la respuesta a bifosfonatos en el tratamiento osteoporótico. De hecho la mayoría de la evidencia en estudios, llevaban en el diseño la toma de calcio y vitamina D.

- Prevención de caidas: Una revisión sistemática sugiere que los suplementos de vitamina D a dosis elevadas de 700 a 1.000 UI al día, pero no a dosis menores, pueden reducir el riesgo de caídas en adultos de edad avanzada y además han demostrado un efecto beneficioso en el equilibrio y en la fuerza muscular.

- Enfermos renales avanzados y en diálisis: En estos casos se utiliza más el calcitriol o paricalcitol para el control de la osteodistrofia renal asociada a el hiperparatiroidismo secundario. El tratamiento con vitamina D activa es fundamental para la salud de estos pacientes y se ha visto efecto beneficioso claro en la calcificación vascular, fracturas y mortalidad.

- Cáncer: la actividad biológica de la vitamina D hace que su relación con la prevención del cáncer pueda ser plausible. Varios estudios se han realizado donde los resultados son escasos. En un metanálisis en el Cochrane únicamente vió beneficios de la vitamina D en el riesgo de presentar Cáncer Colorrectal.

- Riesgo Cardiovascular: Algunos estudios han sugerido la asociación entre niveles bajos de vitamina D y el aumento de la actividad de la renina plasmática, la calcificación arterial coronaria, la elevación de la presión arterial y las enfermedades cardiovasculares. Los estudios han sido observacionales sin asociación clara causal por lo que la evidencia es escasa para estos casos y haría falta estudios más completos.

- Otras: En adultos hay evidencias que sugieren que la vitamina D juega un papel importante en el mantenimiento de la inmunidad y se la ha relacionado con la prevención de algunas enfermedades como las infecciosas, enfermedades autoinmunes (esclerosis múltiple, artritis reumatoide), enfermedades neuropsicológicas y la diabetes mellitus tipo 1 y 2. Aun así faltaría mas evidencia y estudios más completos para fortalecer esta asociación.



CONCLUSIONES

-  Pese a vivir en España, los niveles de vitamina D pueden ser bajos en gran parte de la población. Factores relacionados con los estilos de vida y la alimentación parecen tener relación con dichos hallazgos.

- En población de riesgo, principalmente ancianos, obesos o pacientes con tratamientos crónicos, la suplementación con vitaminada D es necesaria.

- En enfermos renales el tratamiento con Vitamina D es fundamental para la salud osea y cardiovascular.

- Las mejores evidencias sobre los beneficios de los suplementos de vitamina D se dan en la prevención de fracturas y caídas. En pacientes con riesgo alto de caídas y fracturas y en pacientes institucionalizados es razonable suplementar la dieta

- Aunque la evidencia no es tan consistente, la vitamina D ha demostrado en numerosos estudios su papel etiopatogénico en la aparición y/o agravamiento de numerosas patologías. Más investigacion sería necesaria para implemetar recomendaciones en la toma de vitamina D en estos casos.





Bibliografía

Holick MF et al. Endocrine Society. Evaluation, treatment, and prevention of vitamin D deficiency: An Endocrine Society clinical practice guideline. J Clin Endocrinol Metab. 2011;96:1911–30.
 Sanders KM et al. Annual high-dose oral vitamin D and falls and fracture in older women: A randomized controlled trial. JAMA. 2010;303:1815–22.
 Priemel M, et al. J Bone Miner Res. 2010; 25: 305-12
Bischoff-Ferrari HA et al. Fracture prevention with vitamin D supplementation: a meta-analysis of randomized controlled trials. JAMA 2005; 293:2257-64
Bischoff-Ferrari HA et al. A pooled analysis of vitamin D dose requirements for fracture prevention. N Engl J Med. 2012; 367:40-9.
Adami S et al. Vitamin D status and response to treatment in post-menopausal osteoporosis. Osteoporos Int. 2009; 20:239-244.      
- Gillespie LD et al. Interventions for preventing falls in older people living in the community (Review). Cochrane Database of Systematic Reviews 2012, Issue 9. Art. No.: CD007146.
Mazda J et al. Association between pre-diagnostic circulating vitamin D concentration and risk of colorectal cancer in European populations:a nested case-control study. BMJ 2010; 340:b5500.
Song Y et al. Blood 25-hydroxy vitamin D levels and incident type 2 diabetes: a meta-analysis of prospective studies. Diabetes Care 2013; 36:1422-1428.
http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1889-836X2014000500004. Diferentes recomendaciones de sociedad cientificas con vitamina D

viernes, 3 de marzo de 2017

"Me han diagnosticado Nefropatía IgA". Qué debo saber.

En 1968, Berger y Hinglais publicaron el primer caso de Nefropatía denominada IgA o enfermedad de Berger, tras ver en microscópico los hallazgos típicos de esta patología renal. No sabían que, en prevalencia, iba a ser la glomerulonefritis primaria más importante del mundo.

La incidencia de esta enfermdad es de aprox. 2,5 casos por 100000 habitantes con una mayor incidencia en asiáticos y menor en africanos.

Denominada en principio como enfermedad benigna, poco después se observó que hasta el 50% de los pacientes progresaban de forma lenta hasta enfermedad renal crónica avanzada. El resto tiene remisión clínica lenta o enfermedad renal mantenida estable.

Repasamos algunos datos de esta enfermedad para entenderla mejor, saber el pronóstico y las posibilidades terapeúticas que hay.

En verde los Dépósitos de IgA en el Riñón


Síntomas 

Hay dos presentaciones principales de esta enfermedad, asociada o no a insuficiencia renal aguda:

- Hematuria macroscópica, sangre en orina que la ve el paciente, a menudo recurrente y tras infeccion respiratoria o ejercicio intenso.

- Hematuria microscópica (no se ve a simple vista), con pérdida de proteinas en orina no mayor de 3 g.







Causas

Esta enfermedad se debe a un depósito de complejos inmunes de IgA1( células de las defensas en mucosas) en una estrucutura del riñón que se denomina mesangio. Las causas principales son la predisposición genética familiar, infecciones o alteraciones en estructuras de las inmunoglobulinas.
Para que se entienda, en términos coloquiales, ovillos de celulas de defensas llegan al "colador" del riñón, se depositan y producen inflamación y daño, abriéndose los poros y permitiendo la salida de sangre o proteínas a la orina. Si el daño es muy grande, se producen cicatrices crónicas e insuficiencia renal.


El daño renal produce salida de proteinas a la orina


¿Cuales son las causas que predisponen a una mayor progresión de la enfermedad?

- La Hipertensión arterial: Tensiones arteriales mayores de 140/90 o falta de adecuado control.

- La proteinuria: Se ha visto que proteinuria menores de 1 g en 24 y sobre todo las que se mantienen en medio gramo presentan mejor supervivencia del riñón

- La creatinina al inicio: A mayor creatinina, mayor daño renal, mayor expresión de la enfermedad


Tratamiento:


Los inicios del tratamiento van dirigidos a controlar la proteinuria y la hipertensión arterial.
Controlar la hiperlipidemia y la ingesta de sal.

El tratamiento inicial son bloqueadores de sistema renina angiotensina, fármacos conocidos por acabar en -pril o -artán- y ser utilizados para la tensión arterial.
Posteriormente en caso de no mejoría de la insuficiencia renal o proteinuria, se deberá plantear otros tratamiento como la amigalectomía, los corticoides y en casos seleccionados inmunosupresores.

Hoy en día hay ensayos clínicos con fármacos como el micofenolato mofetilo, tacrolimus o rituximab que podrían brindar más opciones a los Nefrólogos y pacientes para el control de esta enfermedad. Muchos años de estudio han dado poca evidencia de la utilización de fármacos inmunosupresores en la Nefropatía IgA.



Conclusión

La Nefropatia IgA, glomerulopatía primaria más frecuente, inicia sus síntomas con sangre en orina, principalmente tras una faringitis o amigdalitis. El control tensional, la pérdida de proteínas en menos de un gramo y no tener Insuficiencia renal en el diagnóstico son claves para el curso benigno de la enfermedad. 

En función de las características de cada paciente con nefropatía IgA el Nefrólogo deberá valorar unas opciones terapeúticas u otras para asegurar la mejoría de síntomas del paciente y la preservación de la función del riñón.